NEUQUÉN: Una empleada municipal de Huinganco denunció abuso sexual en el ámbito de trabajo

Marta Sepúlveda declaró ante Fiscalía que fue agredida por un compañero de trabajo dentro del edificio público. (Minuto Neuquén)

La Fiscalía de la ciudad de Chos Malal investiga una denuncia por abuso sexual presentada por Marta Sepúlveda, trabajadora del Municipio de Huinganco. Según consta en el expediente, el hecho habría ocurrido dentro de una oficina del edificio municipal durante una jornada laboral. La denuncia fue presentada la semana pasada ante el Ministerio Público Fiscal, que dio inicio a una investigación preliminar bajo reserva, tal como lo establece el protocolo en este tipo de causas.

En la denuncia, Sepúlveda relató que el ataque se produjo mientras se encontraba cumpliendo funciones, en un momento en que se encontraba sola con el acusado, un empleado del municipio de Huinganco con vínculos políticos. “Me tomó por sorpresa, dentro del mismo edificio donde trabajamos. No pude reaccionar”, se lee en el escrito presentado ante la Fiscalía. De acuerdo con su testimonio, el agresor se aprovechó de la situación de aislamiento para acercarse de forma violenta, generando un fuerte estado de temor en la víctima.

El momento más crudo del relato de Sepúlveda, según consta en la denuncia presentada en la Comisaría N° 30 de Chos Malal, ocurrió en uno de los excusados del edificio municipal. “Estando en el baño, Estando en el baño, me dice que quiere que le chupe la p***, que le gustaba mi boca, que estaba muy buena. Intenté zafar, lo empujé, le dije que no varias veces. Me agarró del pelo, me tiró para abajo y me introdujo el pene en la boca. Me dieron náuseas. Yo trataba de salir, lo empujaba, y él me decía que esperara un ratito más”. Marta Sepúlveda, explicó por qué decidió hacer pública la situación. “Yo solo quiero que esto no quede impune. Necesito que la Justicia actúe y que no me dejen sola en este proceso”, expresó con firmeza.

En otro tramo de su relato, Sepúlveda dio cuenta de las dificultades personales que atravesó desde el momento en que ocurrió el abuso sexual. “Después de lo que pasó me costó mucho volver al lugar de trabajo. Pero decidí hablar porque no me quiero callar más. Ya no tengo miedo”, sostuvo, en referencia a la cercanía con el poder que tiene el denunciado.

La causa, por el momento, se encuentra en etapa de investigación y con medidas de protección para la víctima. Desde la Fiscalía no brindaron mayores detalles, aunque confirmaron que se ordenaron las actuaciones iniciales, entre ellas la toma de testimonios y la evaluación de otras posibles evidencias. Además, el entorno laboral también quedó bajo observación para determinar si existieron antecedentes o situaciones similares no denunciadas previamente.

El Concejo Deliberante, en silencio

En su testimonio, Sepúlveda también cuestionó el silencio de los integrantes del Concejo Deliberante de Huinganco. “Hasta ahora, ningún concejal se acercó a preguntarme cómo estoy ni a ofrecerme apoyo. Es como si no existiera. Me duele mucho ese silencio, porque ellos deberían estar para cuidar a las vecinas y trabajadores del pueblo”, expresó, visiblemente afectada. La trabajadora pidió que los representantes locales no miren para otro lado ante hechos de esta gravedad y les reclamó compromiso institucional.

Marta Sepúlveda continúa de licencia y recibiendo asistencia profesional. Su decisión de avanzar con la denuncia busca también prevenir nuevos episodios de violencia en el ambito laboral . “Lo más importante para mí es que esto no vuelva a pasar con nadie más. No quiero que otra compañera tenga que pasar por lo mismo”, concluyó.