Procesaron a los 3 sujetos del MLN que cortaron la fibra óptica provincial en octubre

Se trata de tres militantes del Movimiento de Liberación Nacional que el 10 de octubre pasado, tras tomar parte de la protesta contra el radar de la firma Leolabs, ese día retornaron al lugar y realizar una torpe maniobra que afectó a las localidades de Tolhuin y Ushuaia con el corte de los servicios de comunicaciones.

La jueza federal de Río Grande, la Dra. Mariel Borruto, procesó a Claudio Marcelo Ballesta, Emanuel Matías Arese y Roberto Nicolás Giunchetti; tres militantes detenidos a pocos kilómetros del lugar donde realizaron un corte a la red de la empresa Telefónica pensado que afectarían al funcionamiento del radar.

Por esta acción fueron procesados por el delito previsto en el artículo 197 del Código Penal, que dispone que: “Será reprimido con prisión de seis (6) meses a dos (2) años, el que interrumpiere o entorpeciere la comunicación telegráfica, telefónica o de otra naturaleza o resistiere violentamente el restablecimiento de la comunicación interrumpida”. Asimismo trabó embargo preventivo por medio millón de pesos a cada uno.

La resolución tiene amplios fundamentos dado que los autores fueron observados por personal policial en inmediaciones del lugar en que se encontraba el acceso a la fibra óptica instantes antes de que se verificase la interrupción del servicio. Luego en el registro vehicular realizado en la detención en el puesto José Menéndez entre sus pertenencias, fueron encontradas herramientas de corte, cuyos filos eran compatibles con el daño producido en el cableado y que, además, presentaban filamentos plásticos de similares características a los que componían la fibra dañada.
Descartaron a financista del delito
El entrecruzamiento de llamadas y de movimientos bancarios determinó que contaron con el auxilio económico de una agrupación política para trasladarse desde la provincia de Buenos Aires a la localidad de Tolhuin para participar de las protestas vinculadas con el radar, pero no existió un plan organizado para cometer el delito investigado.
De esta manera, se descartó la hipótesis de un financista desde Buenos Aires para esta maniobra en particular.