Un preso dejó en evidencia increíbles falencias de seguridad en la Unidad de Detención 1

Sucedió en la tarde noche de ayer en que un interno fue sacado a un patio cerrado a cielo abierto, escaló un alambrado, y salió al perímetro interno de la Unidad de Detención. Desde las torres de vigilancia lo vieron pero no tenían como avisar a la guardia.

El insólito hecho tuvo lugar pasadas las 21 horas de este martes en la Unidad de Detención 1 del servicio penitenciario, donde el interno Nahuel Boedo protagonizó un presunto “intento de fuga”.

Este interno cumple una pena de 3 años de prisión por distintos robos y delitos contra la propiedad, encontrándose actualmente en una situación personal complicada, ante lo cual desde la guardia le concedieron una salida a la denominada “pajarera”.

Este es un espacio cerrado a cielo abierto que se encuentra al lado del pabellón B, con un alambrado perimetral de seis metros, el cual fue escalado por el interno.

Boedo, sin vigilancia, pudo salir de esta manera al perímetro interno del predio de la Unidad de Detención, quedándole solo por escalar el muro para llegar al exterior.

Una versión dio cuenta que estaban cubiertas las torres de guardia externa en la parte posterior, desde donde observaron a Boedo caminando por fuera del edificio carcelario.

Sin embargo la falta de equipos de radio, llevó a que se comunicaran con sus celulares al teléfono de la guardia, el cual daba ocupado, en una falencia operativa imperdonable.

Tras varios minutos finalmente alguien con acceso al lugar donde estaba Boedo, pudo aprehenderlo, siendo reducido antes de salir al exterior del predio carcelario.

Luego se esto se lo trasladó al hospital para verificación de su estado de salud y se labran las actuaciones internas pertinentes.