PTA. ARENAS: Tragedia en el mar golpea duramente a pareja de pescador que espera un bebé y perdió a su hermano

Los otros dos pescadores aún permanecen desaparecidos, uno es Daniel Ramírez Lemus, hermano de Camila y el amigo de Daniel Colivoro. (La Prensa Austral)

Perder a su compañero de vida en trágicas circunstancias, de un rato para otro, es un golpe muy duro. Como le sucedió a Camila Ramírez Lemus, cuando el miércoles 27 de abril le comunicaron que Cristián Marín Vargas, su pareja, había sufrido un accidente marítimo.

Era uno de los tres tripulantes de la lancha a motor María José I que ese día zarpó temprano a zona de pesca, desde el sector Los Pinos, pero que debido a las inclemencias del tiempo volcó en el sector de Chabunco, a poco más de 20 kilómetros al norte de Punta Arenas.

“Como a las 11 y media de la mañana llamaron para decir que se estaban hundiendo (la embarcación)”, recordó Camila.

El operativo que desplegó de inmediato la Armada permitió encontrar el mismo día el cuerpo de Marín, oriundo de Puerto Montt, quien hace dos años se vino a vivir a Punta Arenas.

Los otros dos pescadores aún permanecen desaparecidos. Uno es Daniel Ramírez Lemus, hermano de Camila; y el amigo Daniel Colivoro.

La Armada confirmó que el operativo cambió de fase, pasando de una “búsqueda activa” a una “búsqueda pasiva”.

Esto se limita solamente a esperar que alguna embarcación aviste algo y lo informe. Pero la búsqueda propiamente tal ya no corre.

“Lo importante es que sigue vigente la alerta para todas las naves y unidades navales que transiten por el área, y todas deben realizar observación e informar de cualquier hallazgo”, indicó el capitán de puerto de Punta Arenas, Rodrigo Esparza.

Tragedia

Camila Ramírez, que perdió en esta tragedia a su pareja, al hermano y a un amigo, se encuentra abatida.

El único consuelo es que el cuerpo de Cristián apareció. Pero ahora quedó sola. Con un embarazo de tres meses, un hijo que viene en camino, y que jamás verá a su padre. Además, tiene a su cargo a la hija de su pareja, una adolescente de 16 años de edad.

Cambio de casa

El primer efecto de la tragedia marítima fue casi inmediato. La Prensa Austral pudo constatar ayer el auto-desalojo de la casa que arrendaba en calle Los Coigües, en la población Fitz Roy.

“Nuestra situación económica ahora es complicada, por eso tenemos que dejar esta casa. Nos tenemos que ir donde mi mamá, con la hija de Cristián y mi pequeño”.

Cuenta que deja el hogar por un tema económico, pero también de índole sentimental, “porque son demasiados los recuerdos (agacha la cabeza y la voz se le quiebra)”.

Fue una relación de pareja de dos años, tiempo durante el cual consolidaron un fuerte vínculo amoroso.

Recordado como un excelente padre, “recién llevaba un mes en faenas de pesca, y en esta salida lo acompañaba mi hermano y un amigo”.

Pide ayuda a delegada

Camila admitió que ayer fue a declarar a la Fiscalía Marítima, y “por lo que entiendo puso término a la búsqueda”.

Los próximos pasos que espera dar son conseguir una entrevista con la delegada presidencial (Luz Bermúdez), para pedirle apoyo en cuanto pueda gestionar que la Armada extienda el operativo.

En todo caso, por parte de los familiares seguirán buscando. Aunque faltan lanchas para este objetivo.

Actividades benéficas

La casa a la que se van a vivir ahora, en la villa Cardenal Raúl Silva, es de la madre de Camila. Ella tiene un corazón bondadoso, pero el espacio físico es pequeño. Esto los dejará en una situación de hacinamiento, así que esperan realizar rifas para reunir algo de dinero y de esta manera poder construir otro dormitorio que les permita un poco más de holgura.

Si  alguien desea colaborar con ellos puede hacer un depósito a la cuenta Rut 19.936.646-7, a nombre de Camila Ramírez Lemus