CIPOLLETTI: violento golpe comando a un Changomas

Dos ladrones armados y encapuchados robaron el supermercado el sábado a la hora del cierre.(lmneuquen)   Esperaron a que se retirara el policía que hace adicionales para entrar a robar. Encapuchados y armados, sorprendieron a los empleados del Changomas de Cipolletti, los obligaron a entregarles una suma cercana a los 100 mil pesos y huyeron con el botín. Uno de los guardias de seguridad fue inmovilizado con una picana eléctrica.     El violento golpe comando al supermercado, ubicado en calle Bolivia 1169, ocurrió cerca de la medianoche del sábado. Una vez que el policía se fue del lugar, cerca de las 23, dos ladrones entraron al comercio.   Bajo amenazas de arma de fuego, condujeron al personal (el encargado, dos empleados y un agente de seguridad privada) hasta la oficina donde estaba la recaudación del día. En ningún momento los empleados se opusieron al robo, pero igual los maniataron con precintos antes de huir, incluso a uno lo redujeron con una picana. En total se llevaron la recaudación del domingo, en billetes de baja denominación, por una suma cercana a los 100 mil pesos. “Tenían información pero a medias o mala información, porque el dinero que encontraron correspondía a la caja chica”, advirtieron fuentes policiales. Equipados para evitar ser descubiertos Los ladrones vestían ropa oscura, tenían el rostro cubierto y se habían colocado guantes de látex para evitar dejar huellas dactilares. Ingresaron al supermercado previo romper el cerco perimetral y acceder por un portón ubicado en la parte trasera. Pese a quedar registrados en las cámaras de seguridad, desde la Fiscalía de Delitos contra el Patrimonio adelantaron que hasta el momento los autores no han podido ser identificados. Además, los investigadores policiales creen que pudo haber un tercero que los esperaba a bordo de un auto, listo para facilitar la huida o para dar aviso en caso de complicaciones. Una vez que pudieron desatarse, las víctimas dieron aviso a la Policía, que acudió de inmediato al supermercado. En el lugar trabajó personal de la Comisaría 24, de la Brigada de Investigaciones y de la Fiscalía. Desde la Policía se aclaró que ningún empleado resultó herido y que el guardia de seguridad sólo tenía un pequeño dolor tras haber recibido la descarga eléctrica de la picana.

Dos ladrones armados y encapuchados robaron el supermercado el sábado a la hora del cierre.(lmneuquen)
 
Esperaron a que se retirara el policía que hace adicionales para entrar a robar. Encapuchados y armados, sorprendieron a los empleados del Changomas de Cipolletti, los obligaron a entregarles una suma cercana a los 100 mil pesos y huyeron con el botín. Uno de los guardias de seguridad fue inmovilizado con una picana eléctrica.
 
 
El violento golpe comando al supermercado, ubicado en calle Bolivia 1169, ocurrió cerca de la medianoche del sábado. Una vez que el policía se fue del lugar, cerca de las 23, dos ladrones entraron al comercio.
 
Bajo amenazas de arma de fuego, condujeron al personal (el encargado, dos empleados y un agente de seguridad privada) hasta la oficina donde estaba la recaudación del día. En ningún momento los empleados se opusieron al robo, pero igual los maniataron con precintos antes de huir, incluso a uno lo redujeron con una picana.
En total se llevaron la recaudación del domingo, en billetes de baja denominación, por una suma cercana a los 100 mil pesos. “Tenían información pero a medias o mala información, porque el dinero que encontraron correspondía a la caja chica”, advirtieron fuentes policiales.
Equipados para evitar ser descubiertos
Los ladrones vestían ropa oscura, tenían el rostro cubierto y se habían colocado guantes de látex para evitar dejar huellas dactilares. Ingresaron al supermercado previo romper el cerco perimetral y acceder por un portón ubicado en la parte trasera.
Pese a quedar registrados en las cámaras de seguridad, desde la Fiscalía de Delitos contra el Patrimonio adelantaron que hasta el momento los autores no han podido ser identificados.
Además, los investigadores policiales creen que pudo haber un tercero que los esperaba a bordo de un auto, listo para facilitar la huida o para dar aviso en caso de complicaciones.
Una vez que pudieron desatarse, las víctimas dieron aviso a la Policía, que acudió de inmediato al supermercado. En el lugar trabajó personal de la Comisaría 24, de la Brigada de Investigaciones y de la Fiscalía. Desde la Policía se aclaró que ningún empleado resultó herido y que el guardia de seguridad sólo tenía un pequeño dolor tras haber recibido la descarga eléctrica de la picana.