La masajista, víctima del asalto, aseguró que “vivo con miedo todas las noches”

Declaró la víctima del violento asalto en el juicio oral y público a cuatro detenidos por este hecho de enero pasado. La mujer relató con detalles como esa mañana la abordaron en su departamento y le apoyaron en su cabeza lo que le pareció un arma de fuego, maniatándola luego para llevarse unas pocas pertenencias. Aseguró que tanto ella como su hijo quedaron con secuelas psicológicas.

 
El Tribunal de Juicio Oral receptó testimonial a Consuela González Cascales, la masajista que el 6 de enero sufrió este violento asalto en su departamento, por el cual están siendo juzgado Franco Aguilera, Cristian Padrón, Nélson Osorio y Víctor Perpetto.
 
La mujer solo pudo reconocer a Aguilera, quien concertó la supuesta sesión de masajes en un servicio que ella brindaba en su domicilio de calle Aeroposta, el cual actuó a cara descubierta, confirmando asimismo que era la misma voz que había reservado la cita vía telefónica.
 
De hecho reconoció varias de las alhajas incautadas en la residencia de Aguilera, como las que le fueran sustraídas esa mañana, además de marcar como propio un colgante hallado en la casa de Perpetto, y un celular de una amiga suya que estaba en su casa, el cual fue incautado en la casa del imputado Padrón, aunque en este último no fue concluyente ya que no pudo indicar signos característicos por lo que se remitirá todo a la pericia del aparato.
 
La mujer relató en forma pormenorizada el traumático episodio sufrido esa mañana en que al abrir la puerta al supuesto cliente, dos personas más encapuchadas y con guantes en las manos le taparon la boca, la redujeron en el suelo y comenzaron a amenazarle para que entregara “el dinero del terrreno”.
 
La mujer aseguró que les informó de los lugares donde poseía 500 dólares y unos 6 mil pesos en efectivo que se llevaron, señalando que insistían con el dinero de un terreno, en lo que luego se determinó que fue un error de los malvivientes.
 
En la declaración de la mujer los cuatro imputados fueron colocados detrás de un improvisado biombo a fin de que la testigo no se sintiera intimidada, señalando González Cascales que “vivo con miedo todas las noches”, dijo, agregando, “tengo que agradecer que estoy viva”, marcando el temor que sintió por su vida.
 
Señaló asimismo que deberá iniciar terapia e incluso su hijo “comenzó a ir al psicólogo”, en referencia al segundo testigo, quien estaba presente en la casa y fue tapada por los asaltantes con una frazada sobre la cama.
 
El arma y un cuarto involucrado
La mujer hizo referencia a dos elementos sustanciales en la causa, el agravante del arma, reconociendo que nunca la observó pero “en todo momento me pegaban en la cabeza con un caño frío, yo sabía que era un arma”, dijo, agregando que el imputado Aguilera dijo a uno de sus cómplices en el lugar del hecho “le dijo no le dés así que se puede disparar, así que yo sabía que me apuntaban con un arma”, aseguró la testigo.
El segundo elemento al que hizo referencia la víctima fue que uno de los encapuchados todo el tiempo se mantuvo en contacto, vía mensajes telefónicos, con una cuarta persona. Incluso refirió que llegó a observar que al final esa persona aseguró “vámonos acá no es nada”, presumiendo que era información que recibía vía telefónica desde el exterior.
 
El tribunal pasó a un cuarto intermedio para este miércoles en que se continuará con más testimoniales.