El juez Cesari Hernández confirmó que seguirán los rastrillajes en estancia Rubi por el arma

Cesari describió el caso del hombre de 60 años que se temía atentara contra su vida, “la peculiaridad de todo esto fue que se origina en un pedido de paradero, tipo de denuncias que no generan la intervención judicial ya que no es una cuestión delictiva, sin embargo cuando me anotician las características de la denuncia, toma intervención el juzgado con conocimiento del fiscal de turno”, agregando, “por que la persona que se ausentó se comunicó con sus familiares vía WhatsApp y les comunica que había dejado una nota en un lugar de la casa, donde refería una cierta situación y pedía perdón por lo que estaba por hacer, lo que nos alertó a nosotros”.
 
Cesari continuó relatando, “se había internado en el monte munido de un arma, se ordenó un operativo cerrojo para ubicar a esta persona y se puso en conocimiento al ministro de Gobierno a fin de no repetir historias pasadas, y se dio intervención a los pasos fronterizos, y fuerzas provinciales y federales”.
 
“Servicios Especiales con 12 hombres y la comisaría Quinta con 8 se adentró en los terrenos de la estancia en una zona muy dificultosa de acceso, cancelándose en horario nocturno. En un momento se lo localizó visualmente sobre un cerro a 200 metros, con la mirada perdida y el arma en la mano por lo que no se le acercaron, y se perdió de vista”, dijo el juez, dando cuenta de las complicaciones de la búsqueda por las particularidades del caso.
 
“A primera hora de la mañana ya con cooperación de Servicios Especiales de Ushuaia con perros y dos drones, y Defensa Civil Provincial; sucedió que el modelo de operativo fue una suerte de cerrojo, se rodeó a una persona con posibles intenciones un arma de fuego, era algo un poquito mas grave, no iba a ser la misma forma la de acercarse”.
 
“Se lo rodeó al punto tal que en la entrevista en el hospital reconoció que le pasaban los policías por todos lados, y decidió volver a la estancia en la noche cuando cesó la búsqueda y pasó la noche en un galpón de esquila, acercándose a los efectivos por la mañana antes que se retomara la búsqueda”.
 
 
Finalmente dio cuenta de que ante el estado “hipotérmico y deshidratado” del hombre “se lo sometió a diversos estudios y quedó a disposición del servicio de Salud Mental de la provincia tanto para su asistencia como la de sus familiares”, ordenó el juez.
 
Mientras tanto “el arma sigue siendo buscada, la persona en estado de crisis dijo que descartó el arma y no se acordaba donde”, finalizó Cesari.