Declaró la joven que mató a su bebé recién nacido “no pude entender en mi corazón lo que hice”

Es lo que declaró Andra Paduán González de 26 años en la primer jornada del juicio oral y público por el homicidio calificado de su bebé recién nacido, el 21 de abril del año pasado, tras dar a luz y escaparse del hospital de Ushuaia. La mujer brindó una extensa declaración y recién al final se quebró en llanto.

 
Paduán González accedió a declarar ante el Tribunal de Juicio relatando situaciones de su infancia, que su abuela tuvo una enfermedad mental, y que sus padres no le prestaban mucha atención afectiva, no eran muy demostrativos.
 
Que cuando tenía 7 años su abuela falleció y recordó que los papas discutían por problemas económicos y de pareja; que a los 10 años escuchó que por eso problemas, su padre dijo que se quería quitar la vida.
 
Que todas esas situaciones repercutieron en su forma de ser. Siempre fue reservada, no tenía muchos amigos.
 
Cuando mejoró la situación económica de su familia, ella se pudo ir a estudiar a Buenos Aires, es técnica en una carrera vinculada a lo audiovisual, que cuando se fue a vivir sola pudo sentirse libre, tener amigos y contacto con las personas.
 
En 2014 conoció al papa de su bebe, Nicolás, trabajaba de cajero de un supermercado al que iba siempre, en Buenos Aires. Él la hacía reír, le hacía bien esa relación, pero cuando tuvieron primera relación sexual, ella sintió rechazo y al día siguiente no quiso verlo más.
 
Luego, regresó a Ushuaia, porque se sentía en la obligación de darle una mano a su familia con el cuidado de sobrinos, para ese entonces cursaba tercer mes de embarazo. Dijo que nunca sintió conexión con el bebe que llevaba dentro y que jamás lo mencionó a su familia.
 
Un lunes abril, llegó con 8 de dilatación al HRU, tuvo al bebe, mintió en datos personales. Dijo que sentía conexión con el hijo, que lo quería dar en adopción, quería hablar con asistencia social para darlo, y que “quería que lo tuviese una familia que lo quiera”.
 
En su relato, contó que como ese lunes tenía que llevar a uno de sus sobrinos a un lugar, quería irse rápido del hospital, entonces se sacó el suero, y se fue, acción que hoy no se explica porque dijo tener “respeto por las criaturas, que no quería matarlo”.
 
Una vez en la plaza del barrio Brown, vio a su madre en la vía pública y todos esos recuerdos de su infancia se le vinieron a la mente y cometió el crimen, del cual no dio los detalles. Finalmente sostuvo que “no pude entender en mi corazón lo que hice”.
 
Testigos
Finalmente declararon el padre de la imputada, Ramón Héctor González; la madre Isabel Magdalena Paduan, quien dijo que nunca notó el embarazo de su hija; y finalmente la hermana, Gabriela Marisel González.
 
Asimismo declaró el psicólogo de la imputada quien indicó que la paciente “tiene trastorno ezquizoide de la personalidad” y que “los síntomas del trastorno es distanciamiento emocional y no se permite conexión con las personas eligen vida solitaria y no le gusta ponerse en contacto con emociones de otras personas”.
 
L a psiquiatra del Poder Judicial descartó que la joven tenga psicosis y aseveró que posee tendencias suicidas, tras lo cual el tribunal pasó a un cuarto intermedio para este viernes a las 10 de la mañana cuando se conocerán los alegatos de las partes.