Este jueves comienza en Ushuaia juicio contra madre que asesinó brutalmente a su bebé recién nacido

El proceso oral y público comienza este jueves 5 de mayo en el Tribunal de Juicio Oral de Ushuaia contra Andrea Paula González Paduan, la mujer de 26 años que el 21 de abril del año 2015 diera a luz un bebé en el hospital capitalino. Tras el nacimiento escapó llevándose al neonato siendo luego detenida en su domicilio con el cuerpo del bebé, ya fallecido, guardado dentro de un armario. Está acusada de homicidio doblemente agravado y la hipótesis fiscal es que golpeó durante todo el trayecto del hospital a su casa al niño hasta matarlo.

 
La causa fue elevada a juicio por el fiscal Fernando Ballester Bidau, quien acusó formalmente a González Paduan del delito de homicidio doblemente agravado, tanto por el vínculo con la víctima, como por el ensañamiento y alevosía puestos de manifiesto en aquella oportunidad.
 
El tribunal compuesto por los Dres. Pagano Zavalía, García Arpón y Guillermo González, dispuso para este jueves el inicio de las audiencias, en las que González Paduan estará representada por el Dr. Raúl Paderne como abogado.
 
El proceso contará con 11 testigos y se remitirá al aberrante hecho generado a partir de lo que la mujer señaló fue una ocasional relación sexual en Buenos Aires, por la que quedó embarazada, en una gestación que aseguró, intentó ocultar y negar a su familia.
 
El 21 de abril por la mañana se dirigió de su casa en calle Marcos Zar 360 al nosocomio dado que había entrado en labores de parto, por lo que finalmente dio a luz cerca de las 7.00 horas a un pequeño al que denominó como Felipe Solari, ya que la mujer se internó bajo una identidad ficticia (Belén Solari).
 
La mujer reconoció a la enfermera que el niño era una concepción no deseada y luego de unas dos horas de convalecencia decidió tomar al pequeño y escapar del centro de salud, iniciándose una búsqueda que inmediatamente permitió localizarla ya que en el nosocomio no mintió respecto de su domicilio.
 
Tras negar ser “Belén Solari”, la joven finalmente fue identificada como la paciente fugitiva y la Policía terminó acorralándola, hasta que confesó que tenía el cuerpo muerto del bebé, dentro de un armario en su habitación, aparentemente ello en desconocimiento de su familia que no habría sido consciente en ningún momento del embarazo.
 
La mujer es la única imputada, ya que las pericias y su confesión, demostraron que a lo largo de todo el camino del hospital a su casa fue golpeando y asfixiando al bebé, de modo inimaginable, a fin de acabar con la vida de su propio hijo.