Uno de los policías agredidos tendrá una cirugía y no descartan una intervención neurológica a causa de los golpes

La Policía Provincial brindó un detallado informe de la situación de salud de los dos efectivos policiales brutalmente golpeados el 23 de febrero pasado en la ciudad de Ushuaia. La situación más comprometida es la del cabo Zárate en un hecho por el cual cabe recordar que la Justicia no tiene detenido a ninguno de los imputados.

 
La Jefatura de Policía brindó información con respecto al estado de salud y evolución de los cuadros médicos que hoy presentan los suboficiales Basan y Zarate, los cuales fueran víctimas de un hecho de violencia por parte de 5 personas, en el marco de un procedimiento habitual, ocurrido el pasado 23 de febrero del corriente año mientras se intentaba identificar a un grupo de individuos.
 
Ambos efectivos continúan bajo la órbita de atención de los profesionales de la ART, por lo que una vez desvinculados de la atención medica brindada en primera instancia por personal del Hospital Regional Ushuaia, fueron sometidos a una serie de estudios específicos complementarios de distinta complejidad para determinar fehacientemente el tipo de lesiones que cada uno presenta producto de los golpes recibidos, siendo atendidos por los especialistas acordes a las afecciones que presentan.
 
En el caso del Cabo Zárate, “el mismo fue evaluado por un especialista máxilo facial que se encuentra en la ciudad de Ushuaia, pudiéndose determinar que es necesario llevar adelante una intervención quirúrgica, con el fin de colocar una placa y una malla de contención en el sector del rostro en donde apoya el ojo, para que el mismo se vea más reforzado, destacándose que si bien  no se encuentra comprometida la visión del servidor público, es necesaria tomar dicha medida para evitar algún tipo de secuela a futuro en este sentido”.
 
“Asimismo, y a raíz de la preocupación que el asunto conlleva, el Médico de Policía, del Área de Fiscalización, recomendó una interconsulta con neurología”, indica el parte.
 
En cuanto a la condición médica del cabo Bazán, “está siendo atendido por un especialista en Traumatología y cirugía, teniendo en cuenta la lesión que presenta en rodilla, sumado a la herida cortante sufrida en la cabeza, no surgiendo hasta el momento anomalía alguna en los tratamientos suministrados”.
 
Asimismo la Policía informó que los efectivos y su familia cuentan con apoyo y seguimiento psicológico desde el área de Bienestar de la Policía, así como también de parte de la Asesoría Letrada, “por lo que nos presentaremos como querellantes en la causa”.