CDRO. RIVADAVIA: Un militar corrió a tiros a un ladrón armado al que sorprendió en su casa

El cabo Lucas Sánchez regresaba ayer a la mañana a su vivienda junto a su esposa y a su pequeña hija. Encontraron su televisor LCD envuelto en una manta sobre una ventana. Al ver aproximarse a un delincuente armado, la mujer gritó y entonces Sánchez tomó su arma de tiro práctico y disparó cerca de las piernas al ladrón que escapó llevándose un cargador de teléfono celular y dos notebook dañadas (El Patagónico).

 
El cabo del Ejército Argentino, Lucas Sánchez, defendió a tiros ayer a la mañana a su esposa, su pequeña hija y sus bienes de un asaltante armado que había irrumpido en su casa. Corrió a tiros al delincuente que ya se había apoderado de varios elementos de la vivienda de la familia, en Quichamal y Antártida Argentina, de Kilómetro 3, en el sector al que se conoce como “Barrio Militar”, pasando el predio que fuera de la ex Compañía de Comunicaciones 9.
El propio Sánchez, en diálogo con El Patagónico en la guardia de la Comisaría Mosconi, comentó que ayer a las 10 llegó a su vivienda para dejar a su esposa -también integrante del Ejército- y a su pequeña hija de un año, cuando se encontró con que les estaban robando.
Cuando ingresaron y encontraron todo revuelto en las habitaciones y el comedor, se percataron de que el televisor LCD estaba apoyado en la ventana abierta de la habitación, envuelto en una sábana.
Sánchez salió al patio para ver si encontraba a los delincuentes, mientras su esposa y la bebé se quedaron en el interior de la casa.
De repente, la mujer observó llegar del patio de un vecino a un hombre armado en busca del televisor y comenzó a gritar. La bebé lloró y Sánchez, que estaba en el frente de la vivienda, ingresó rápido, tomó su arma de tiro práctico -que tenía escondida- y enfrentó al delincuente.
 
LE TIRO A LOS PIES
Sánchez –también conocido por su participación como árbitro y juez de línea en la Liga de Fútbol de Comodoro Rivadavia- no dudó un minuto en defender a su familia, pero tomando precauciones respecto del lugar al cual disparaba. Los dos impactos los dirigió al suelo, cerca de las piernas del delincuente y con el fin de ahuyentarlo. El ladrón pese a estar armado escapó sin disparar su arma, quizás sorprendido por una resistencia que no esperaba. Un segundo delincuente también huyó corriendo.
Según lo que estableció la policía, los delincuentes llegaron en el remis de una agencia al que estacionaron en el patio de la vivienda lindera que también se encontraba sin moradores. Los ladrones saltaron de un patio al otro por los patios traseros de las casas y rompieron una ventana de la casa de Sánchez con una baldosa.
Alcanzaron a llevarse dos notebooks -una marca Bangho y otra Lenovo- que según la víctima estaban dañadas.
Cuando el remisero se dio cuenta de lo que estaban haciendo sus pasajeros, se fue del lugar.
Los delincuentes no alcanzaron a llevarse el televisor, pero sí el cable de alimentación y un cargador de un teléfono celular.
Sánchez pudo poner a salvo a su familia, ante la amenaza del delincuente armado, pero le quedó la sensación de impotencia porque los ladrones además de robarle hurgaron toda la vivienda.
El militar radicó la denuncia en la Comisaría Mosconi y personal policial de la Brigada de Investigaciones trabajaba ayer en procura de poder identificar a los autores del robo. Los mismos escaparon con rumbo desconocido.
Una vecina, que no es personal militar pero que vive en el mismo sector, dijo ante el despliegue policial luego del robo en el barrio: “yo también estoy armada, y si tengo que usar el arma la voy a usar”.