CDRO. RIVADAVIA: investigan la muerte de un joven con un balazo en la cabeza

En la noche del sábado confirmó el fallecimiento de Luis Barrientos, quien se encontraba internado con muerte cerebral en el Hospital Regional. Los médicos ya habían iniciado los estudios de rutina para una potencial ablación de órganos, pero la víctima no resistió el daño de las lesiones. El joven recibió un disparo en la cabeza ayer a la madrugada y la Fiscalía investiga si fue él quien se lo provocó o se trató de un intento de homicidio (ADN Sur).

 
 En el caso trabaja personal policial de la Seccional Séptima, que fue anoticiado a la 1.00 de la madrugada de sábado desde el Hospital Regional sobre el ingreso de un herido de bala. Allí llegó la víctima en un Volkswagen Gol, cargado por los amigos que pidieron ayuda para trasladarlo.
 
La confusión reinó en las primeras horas y por tal motivo, autorizados por la fiscal de guardia en los términos del artículo 215 del Código Procesal Penal, la policía demoró a dos personas, una de las cuales es menor de edad.
 
Los testigos fueron coincidentes en sus entrevistas, a través de las cuales se pudo saber que Luis Barrientos se encontraba junto a ellos consumiendo bebidas alcohólicas en extensión del barrio Máximo Abásolo, justo en la vereda de la casa de Cristian “Chucky” Monsalvo, quien recientemente salió de prisión, pero que no tuvo relación con el incidente.
 
El relato indica que en el grupo había un revólver calibre 32 al que los tres integrantes del grupo e inseparables amigos, tenían acceso. En un momento dado, según los testigos, la víctima pronunció unas palabras indescifrables y se disparó, por lo que ambos acudieron a pedir ayuda a la casa de “Chucky”.
 
En el marco de la investigación personal de la Policía Científica practicó pruebas de dermonitrotest, tanto al herido como a los dos testigos presenciales, aunque los resultados se conocerán en las próximas horas y con ello se sumarían elementos para inclinarse hacia tal o cual hipótesis.
 
Allanamientos
A todo esto, en el transcurso de la jornada de sábado y por pedido de la Fiscalía, la policía de la Seccional Séptima llevó a cabo tres allanamientos domiciliarios en la extensión del Abásolo. Fue en procura de ubicar el arma, dado que en la confusión que se generó ante el pedido de auxilio, los testigos la perdieron de vista y se presume que fue robada por personajes que entraron a escena luego de producido el disparo.
 
De todas maneras, las fuentes oficiales consultadas por Diario Patagónico confirmaron que no arrojaron resultados positivos los allanamientos y el arma no fue encontrada.
 
Por lo pronto el caso está en investigación y con la muerte de Barrientos se avanzará en la autopsia. Además, como la víctima estaba indocumentada deberá realizarse un acta de reconocimiento con la correspondiente toma de huellas dactilares, para la posterior entrega del cuerpo