Podría recibir una condena de 6 años por el delito de “grooming”

Se elevó a juicio oral la causa que tiene a Ceferino César Díaz acusado por los delitos de corrupción de menores, “grooming” y estupro. La Fiscalía de Sarmiento pretende una condena de 6 años de prisión y mientras se aguarda el debate el acusado continuará detenido en la comisaría de Dolavon.

 
 La audiencia preliminar contra Ceferino César Díaz (35) se realizó mediante video conferencia entre las oficinas judiciales de Sarmiento y Trelew. El acto fue presidido por la juez penal, Ivana González. Allí el Ministerio Público Fiscal fue representado por el fiscal general Herminio Gonzáles Meneses, mientras que el imputado fue asistido por el defensor público, Gustavo Oyarzún.
 
En la audiencia también estuvo presente la asesora de Menores y Familia, Gabriela Francisco, mientras que los familiares de la víctima fueron acompañados por la psicóloga Romina Percivale, del Servicio de Asistencia a la Víctima del Delito (SAVD).
 
A su turno el fiscal relató los hechos consignados en la acusación pública y solicitó a la magistrada que se declaren admisibles 17 pruebas documentales y 27 testimoniales que se ventilarán en el juicio.
 
Con respecto a la prisión preventiva, el acusador solicitó el mantenimiento hasta la realización del juicio. Sus fundamentos se basaron principalmente en el peligro de fuga por la falta de arraigo.
 
Por su parte, la defensa planteó la nulidad de una de las pruebas ofrecidas por la parte acusadora y solicitó que se morigerara la prisión preventiva por un arresto domiciliario que Díaz debería cumplir en su vivienda ubicada en el barrio “Los Pocitos”, en la provincia de Tucumán.
 
En este contexto, Oyarzún propuso la aplicación de una suspensión de juicio a prueba argumentando que el mínimo de la pena que podría corresponderle al imputado sería de tres años de prisión.
 
Si prosperaba este pedido, Díaz debía fijar domicilio, someterse al control del servicio de patronato de liberados y realizar 30 horas de trabajo comunitario a favor de una institución pública de Tucumán.
 
Finalmente la juez rechazó el planteo de la defensa con respecto a la nulidad de las pruebas y tampoco hizo lugar a la probation que propuso la defensa.
 
Al momento de resolver sobre la medida de coerción, la magistrada coincidió con los fundamentos de la Fiscalía y dispuso la continuidad de la prisión preventiva. Por ello, Díaz permanecerá detenido en la comisaría de Dolavon hasta la realización del juicio.
 
Además, estableció que la calificación legal provisoria correspondiente es la de presunto autor de los delitos de corrupción de menores, “grooming” y estupro, tras lo cual declaró admisible la totalidad de las pruebas ofrecidas por los acusadores y elevó la causa a juicio oral.
 
LOS HECHOS
 
A partir de noviembre del año pasado, Díaz comenzó a tener un contacto o acercamiento virtual con contenido sexual con la menor de 14 años a través de la red social Facebook. El imputado utilizó mensajes de texto para ganarse su confianza, logrando una empatía con el propósito de lesionarla en su integridad sexual.
 
Los investigadores indicaron que el 27 de marzo último ese contacto virtual se convirtió en un contacto real. Como consecuencia, Díaz se llevó a la menor de Sarmiento. Además, le retuvo el celular quitándole el chip y la memoria, por lo que la menor quedó sin poder comunicarse con personas de su confianza.
 
Ambos fueron hallados por personal policial en la terminal de Liniers, en Buenos Aires, a bordo de un transporte de pasajeros de la empresa El Cóndor.
 
Para la Fiscalía, el acusado viajó exclusivamente hasta Sarmiento para buscar a la menor. Con anticipación, tenía en su poder los boletos de los colectivos que utilizaría para llegar a la terminal de Retiro, en Capital Federal.
 
Se conoció también que por medio de mensajes de texto el acusado le realizaba propuestas de explícito contenido sexual, utilizando un léxico que no es propio para la edad de la menor.
 
En este marco, se pudo establecer que el imputado también habría cometido el delito de estupro y para el fiscal el accionar “intervino en el sano y normal proceso de formación de la sexualidad de la menor”.